PALACIO DUCALLE
CANALE DE LA GIUDECA.
LAS MUJERES EN BURANO.
Finalmente pudimos ir a Venecia. Está más hermosa que nunca! Arrendamos en el barrio Cannaregio, donde viven los venecianos de verdad que aún quedan por acá. Estuvimos los tres días recorriendo las calles, cruzando puentes, y admirando la ciudad. Solo entramos al Palazzo Ducal porque los niños no aguantaron exposiciones ni museos. Nos comimos unos tramazzinis (que yo juraba que era algo típico y resultaron ser sandwich) super ricos y un vaso de vino en un bar escondido recomendado por el routard y que resultó milagrosamente económico. Almorzamos pastas a la Carmencini todos los días en el depto, pero compré unos pestos y vinos en un almacén de la esquina. El picante lambrusco (vino tinto con burbujas) resultó ser un descubrimiento en ese local. Lo que más me llamó la atención es la costumbre de ir a los bares y tomarse un vaso de vino en el mesón, y ver a mujeres super regias, estupendas y vestidas a lo D&G tomando café paradas en unos locales minúsculos llenos de gente. Claro que la Sofía Loren te sirve el café, por decir lo menos....
A los niños les gustaron los gelattos y el vaporetto; y a Pablo le gustó todo, con italianas incluidas claro está. Nos dio pena partir, pero con el negro esperamos poder volver algún día.
1 comentario:
Pero que bonito oiga! Y que grandes estan los ninios y largo el pelo de Pablo! (Yo me tuve que esquilar al volver).
Con la Ale fuimos al Venetian, un hotel en Las Vegas que le lleva Puente de los Suspiros, Palacio Ducal, Campanil, y un canal adentro con tiendas, boveda pintada como cielo, olor a cloro y gondolas con cinturon de seguridad y motor electrico. O sea, igualito.
Saludos desde Chile
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